No hay que ser un erudito en la materia (economía) para saber que la economía mundial y la economía de nuestro país está atravesando una situación casi inverosímil. Debido a las malas decisiones del gobierno en materia de inversión y atracción de capital extranjero, las multinacionales y\o empresas no quieren o sienten suspicacias en invertir en esta tierra sagrada llamada Perú. 

Antes de caer en este horrendo 2,8 % de PBI del año pasado, se necesita y es deber informar cómo le fue a nuestra economía en el año 2011. El Perú caminaba bien, atraía capital extranjero, se podía hacer negocios sin ningún tipo de aspaviento; en síntesis, 7.5 % de promedio anual. Hoy en el mes de mayo nuestro PBI llega al borde del 2,3%, algo que para los conocedores y no conocedores es sumamente caótico para la empleabilidad y oportunidad laboral que pueda surgir. Cabe decir que por cada porcentaje que se disminuye se pierde o queda en el olvido más de 200,000 puestos de trabajo empezando desde la micro hasta la gran empresa, y las cifras de pobreza en los sectores más vulnerables aumenta. 

Ahora que entró un nuevo gabinete presidido por Pedro Cateriano, es deber exigirle a él y sobretodo al presidente Humala, que en los próximos 17 meses que queda de gobierno, se centre en la economía y también en otros puntos importantes como es la seguridad ciudadana y problemas sociales que siempre los hay. 

Esperamos con optimismo y sobretodo con mucha paciencia que nuestro país pueda reencontrarse con el rumbo que tenía viniendo y que para las elecciones del 2016 sea el pueblo quién tendrá el poder de hacer un análisis exhaustivo en materia económica y social.